jueves, 2 de octubre de 2008

INCIDENCIA DE LAS REPOBLACIONES FORESTALES EN EL POTENCIAL CINEGETICO DE UN TERRITORIO.


Cuando en un territorio se proyecta y posteriormente se realiza una repoblación forestal o una reforestación, es conveniente diferenciar tres aspectos, al menos en cuanto a la incidencia que estas pueden representar para el potencial cinegetico de nuestro coto:

Estado previo a la forestación.

Esto es, estado ecologico, es decir vegetal y animal que presentaba el area a reforestar.
No es lo mismo reforestar una ladera de piornos, de brezos, un fondo de valle cubierto de pastos o una planicie. Cada uno de estos supuestos presenta un pequeño ecosistema en si mismo capaz de favorecer o perjudicar la pervivencia de unas u otras especies animales, con lo que la radical alteración de este ecosistema actuara de manera determinante en la expansión o desaparición de segun que especies se trate.

Estado inmediatamente posterior a la forestación.

Una vez realizadas las labores de forestación, es decir, preparación del terreno, implantación de la vegetación, apertura de pistas y cortafuegos, etc, el terreno ha sufrido un cambio radical, la vegetación existente, generalmente pasto o monte bajo ha desaparecido y por el contrario encontramos un terreno limpio, desprovisto de maleza y con una vegetación implantada que lucha por adaptarse.


Reforestación a largo plazo.

Transcurrido un tiempo, generalmente años, la vegetación implantada va abriendose lugar y colonizando el terreno que habia quedado limpio, ademas, las especies herbaceas y la vegetación existente antes de la forestación reaparecen, el impacto visual disminuye y la cobertura vegetal aumenta, el ecosistema cambia de nuevo.




Una vez entendido esto diremos que sobre todo la caza menor, debido al abandono de los usos tradicionales del suelo, es decir desaparición de la ganaderia y la agricultura y el paulatino abandono del terreno rustico y forestal, hace que el habitat para este tipo de especies(de caza menor) halla sufrido un menoscabo importante y una perdida considerable de habitat, por contra especies oportunistas y que compiten directamente con nuestras especies de menor, como son, zorros, jinetas, jabalies, garduñas, etc se han visto beneficiadas, aumentando su población de manera proporcional a la dismininución de las especies de menor.
Tras una repoblación, la limpieza de la vegetación, ya sea mediante roza o desbroce, y el movimiento de la capa de tierra superficial hace que las condiciones para el desarrollo de la caza menor aumenten, mientras que la elimincación de la maleza disminuye las especies competidoras.
Podemos decir pues, que los primeros años posteriores a una reforestación benefician el desarrollos de las especies de caza menor.
Esto será así hasta pasados unos años, entonces la aparicion de vegetación de porte bajo y el gradual desarrollo de los arboles implantados, variaran nuevamente el ecosistema beneficiando a las especies de caza mayor y en detrimento sobre todo, de las perdices, liebre y conejos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

type='text/javascript'/>